Elizalde, C.R.1*; Dieste; P; Sáenz, P; Lorente, M; Fernández, V; Hernández, J.
Servicio de ginecología y obstetricia, Hospital San Pedro. Logroño, España.
INTRODUCCIÓN
Los tumores malignos de la vulva constituyen el 3-5% de los cánceres genitales femeninos y el 1% de las neoplasias de la mujer. Se diagnostican en edades avanzadas, pero en la última década se ha descrito un aumento de lesiones precursoras y de carcinoma vulvar invasivo en mujeres jóvenes asociado con el incremento de la incidencia del virus del papiloma humano (VPH).
DISCUSIÓN
El término VIN (Neoplasia Vulvar Intraepitelial) se utiliza para denotar lesiones escamosas de alto grado y se subdivide en VIN tipo común y VIN diferenciada. La VIN tipo común se asocia frecuentemente con genotipos carcinogénicos del virus del papiloma humano (VPH) y con otros factores de riesgo de persistencia del VPH como el tabaquismo y el estado de inmunodepresión.
CONCLUSIONES
El tratamiento puede ser muy mutilante, con las implicaciones psicológicas y estéticas que ello supone. Su génesis se relaciona, en la mayoría de los casos, con la infección viral por virus del papiloma humano (VPH), y este a su vez puede producir otras lesiones a otros niveles del tracto genital inferior Se debe realizar una esmerada labor de prevención (especialmente, la vacuna para los serotipos de alto riesgo) y de educación sexual. Por otro lado, resulta obligado un tratamiento adecuado, lo más conservador posible, así como un minucioso seguimiento de recurrencias y de la posible aparición de nuevas lesiones a otros niveles, sobre todo si la infección es producida por virus de alto riesgo.